Fundamentación del proyecto
La problemática relativa al estado eutrófico del Mar Menor es un paradigma del impacto de la agricultura intensiva en el medio ambiente a nivel internacional. No obstante, esta dramática situación puede llegar a dejar en un segundo plano otros problemas del entorno del mismo ecosistema, con soluciones no polémicas y que solo necesitan las ganas y trabajo de personas involucradas. Un ejemplo es la gestión de la «basuraleza» en las escasas zonas naturales que quedan en su ribera. A parte de la ausencia de concienciación, su cercanía al medio urbano y a terrenos agrícolas intensivos facilita que, tras la escorrentía desencadenada por las precipitaciones torrenciales características del Levante, sus saladares acaben tapizados por mangas, plásticos agrícolas, toallitas, latas, étc.
El movimiento Scout alberga una metodología cuyo fin es construir un mundo mejor, incluyendo la faceta ambiental. Para ello parte del concepto de «la buena acción diaria», a partir de la cuál se desarrolla el espíritu voluntario. Concretando en medio ambiente, cada una de las secciones en las que este movimiento está dividido [de acuerdo a la edad de los educandos: Lobatos (7/8-10/11 años), Scouts (10/11-14/15), Escultas (14/15-17/18) y Rover (17/18-20/21)] alberga un bloque destinado a la preservación de la naturaleza, existiendo una de las 12 leyes que rigen el movimiento cuya finalidad es la comentada: «El Scout cuida y protege la naturaleza». Al no partir de una premisa ecologista sensu estricto, estos valores ambientales son enseñados a personas ajenas al mundo de la conservación, permitiendo una expansión de las actitudes «proambientales» en nuevos nichos.
Nuestro grupo Scout San Francisco Javier 205, tiene esto muy presente, llegando a llevar incluso una comunicación a un congreso de biodiversidad (ConserBio III) titulada «Los scout como vía para la educación ambiental». Nuestra idea es establecer sinergias desde nuestra asociación voluntaria en sentido amplio para tratar de construir el mundo mejor al que aspiramos. Para ello, queremos comprometernos a que nuestros educandos mayores enseñen a nuestros pequeños, tanto con la acción, como con el por qué de esta. En este caso, nuestra área objetivo será el entorno natural que rodea el Mar Menor, desde las Playas de la Hita en el Norte hasta las Salinas de Marchamalo en el Sur, sin olvidar el Carmolí, lo Poyo y la Playa del Arsenal.
Actualmente estos lugares pese a estar protegidos se encuentran con gran cantidad de residuos.
100 kg
El Carmolí
250
Lo Poyo
250
Proyecto financiado por:
#HéroesLibera
Entidades colaboradoras de nuestro proyecto:
AAVV San Francisco Javier
Los Barreros